
La razón por la que en cualquier dieta se desaconseja un consumo elevado de este condimento, se debe a que un exceso en nuestra dieta puede dar lugar a afecciones cardiovasculares, sin olvidar que el sodio también es necesario en cierta medida para el equilibrio de líquidos, transmitir impulsos nerviosos y contraer músculos.
Si eres de esas personas que tienden a la retención de líquidos o sufre alguna afección cardiovascular, debes evitar los alimentos excesivamente salados, ya que no favorecerán en absoluto a mejorar tu estado físico y mucho menos tu salud.
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